Este aceite está elaborado con las variedades Morruda, Farga y Sevillenca, que son las tradicionales en las Tierras del Ebro.
Molí de la Creu Aceite de Oliva Virgen, se ha obtenido con aceitunas de producción propia, en la comarca del Montsià, siguiendo las pautas del cultivo tradicional.
En la obtención de este aceite sólo se han empleado procesos mecánicos de extracción en frío.
El fruto de estas variedades se ha cosechado desde mediados de diciembre hasta mediados de febrero, con un grado de maduración muy alto. Tal como tradicionalmente hemos elaborado el aceite de oliva en nuestra comarca, a partir de las aceitunas dejadas madurar arriba del árbol.
Este punto de maduración, permite obtener un aceite con frutado de aceituna madura, identificable en nariz y boca, que muestra la preponderancia del dulce, sobre el amargo y el picante.
Destaca por su gran diversidad de aplicaciones culinarias. Su dulzura combina muy bien con todo tipo de alimentos. Por sus características organolépticas y químicas, podemos emplearlo tanto en crudo como en caliente.
En conjunto, resulta un aceite muy equilibrado y armónico. Tanto para el olfato como para el paladar.